Doctora en Ciencias Químicas por la Universidad Complutense de Madrid, jefa de unidad del CIBERER-ISCIII y profesora de investigación del CSIC en el Instituto de Investigaciones Biomédicas ‘Sols-Morreale’ (CSIC-UAM), Isabel Varela Nieto dirige en este centro el grupo de Audición y Mielinopatías, que centra su investigación en la comprensión de las bases genéticas y moleculares de la audición y de la pérdida auditiva. La actual presidenta de la SEBBM, segunda mujer que ostenta este cargo tras Margarita Salas en los sesenta años de vida de la Sociedad, ha representado a España en distintos paneles internacionales, que incluyen los comités de Biomedicina de la ESF (European Science Foundation) y de COST (European Cooperation in Science &Technology). Ha sido miembro de la Comisión Science & Society de la Federation of European Biochemistry Societies (FEBS), formó parte del grupo de trabajo de FEBS Network y presidió el Comité Internacional de la Association for Research in Otolaryngology (ARO). En la actualidad es vocal asesora de la presidenta del CSIC, pertenece al consejo científico asesor de la Fundación Gadea Ciencia y es miembro del comité de finanzas del International Science Council (ISC). Isabel Varela Nieto es miembro de la SEBBM desde 1982, en los últimos quince años ha formado y coordinado el Grupo de Apoptosis (2005-2008), ha sido secretaria electa (2008-2010), secretaria científica (2010-2014) y presidenta electa (2018-2020). Por último, entre 2008 y 2014 formó y coordinó la Comisión “Divulgación: Ciencia para Todos”.
Estamos de enhorabuena. La Sociedad que preside cumple 60 años, acaba de celebrar su 46º congreso ¿Cómo ha evolucionado la SEBBM en este tiempo?, ¿Cómo ha cambiado la bioquímica y la biología molecular en estas seis décadas?
La SEBBM se constituyó el 2 de agosto de 1963, en Santiago de Compostela, contando como socios fundadores con dos Premios Nobel: Luis F. Leloir (Argentina) y nuestro Severo Ochoa. Nació como Sociedad Española de Bioquímica (SEB) con unos objetivos definidos en sus estatutos que se pueden resumir en: “avanzar la investigación científica y crear oportunidades para los investigadores en este campo”. Se incorpora años después la Biología Molecular a nuestro nombre.
La SEBBM ha mantenido estos objetivos, pero ha evolucionado con el transcurso del tiempo. En numerosas ocasiones, como en el momento de su fundación, ha ido por delante de su tiempo y ha sido un motor de la ciencia y de la sociedad española. En esta línea, se puede destacar nuestro interés por contribuir a aumentar la cultura científica mediante la divulgación y la apertura de la SEBBM a la sociedad española. Fuimos pioneros incorporando este objetivo en 2008, como se recoge en los Cuadernos de Divulgación.
En estos 60 años, la SEBBM no ha dejado de evolucionar de la mano de los avances científicos, con cambios difíciles de resumir en una entrevista, como, por resaltar algunos, los nuevos editores genéticos, los tratamientos basados en el ARN, el activo papel de los lípidos en la fisiopatología que no deja de ampliarse, y un largo etc. Más genéricamente, nuestra disciplina ha contribuido a forjar el concepto de biomedicina y al desarrollo de la biotecnología. En su conjunto, es enorme el impacto que el avance del conocimiento generado en nuestra área ha tenido en mejorar la calidad de vida y en la salud. Por ejemplo, este año el descubrimiento de la insulina y el término lípido cumplen 100 años. En este tiempo, se han primero comprendido y luego curado o paliado enfermedades antes incurables, como la diabetes. Hemos incorporado continuamente a nuestra sociedad estos avances científicos por medio de nuestros grupos científicos, que tienen una vida dinámica.
Como segunda mujer en presidir la SEBBM, después de Margarita Salas (1988-1992), ¿qué significado tiene para usted ocupar este cargo y cuáles considera que han sido los cambios más relevantes en el papel de las mujeres en la ciencia, especialmente en la bioquímica y la biología molecular, en los últimos años?
Una enorme responsabilidad y un honor. Empezaba el doctorado cuando, a instancias de mi director, me hice socia y, desde entonces, la SEBBM me ha acompañado, guiado y promocionado. Trabajar ahora para la SEBBM es devolver lo mucho recibido y una oportunidad para contribuir a tres aspectos que me importan mucho: apoyar la carrera profesional de mis colegas a todos los niveles, aumentar la cultura científica de mis conciudadanos y mejorar la visibilidad de la investigación científica en nuestro país.
Las investigadoras del momento estuvieron muy implicadas en los inicios de la sociedad: Margarita Salas, Gertrudis de la Fuente y Gabriela Morreale, entre otras. Sus biografías se pueden consultar en nuestra web. La presencia de investigadoras en la junta directiva no ha dejado de crecer y ahora es mayoritaria, pero es cierto que, en 60 años, de 15 presidentes, sólo dos hemos sido mujeres y que es una cifra a mejorar. La visibilidad de las mujeres importa, y mucho.
Por esto, Mujer y Ciencia es otro de los temas que empezamos a trabajar de forma pionera en SEBBM en 2008. Enmarcado entonces en el área de Divulgación, se transformó en Grupo Científico transversal hace unos tres años. Se nos sigue preguntando si es necesario y hay que seguir contestando que sí, que es muy necesario porque las cifras de mujeres ocupando puestos de decisión o llegando al nivel más alto de la carrera científica siguen siendo bajos. Al nivel internacional, la proporción de Mujeres Nobel, tomada como un indicador no es mucho mejor. Se ha avanzado hasta identificar el problema, nombrarlo y empezar a buscar e implementar soluciones. Pero preocupa que las soluciones no terminan de funcionar, hay que volver sobre el diagnóstico y actuar antes, por esto estamos muy implicados con acciones como la de Mujeres y Niñas en la Ciencia.
“Las cifras de mujeres ocupando puestos de decisión o llegando al nivel más alto de la carrera científica siguen siendo bajos”
Según la UNESCO, menos del 30% de los investigadores en el mundo son mujeres. ¿Cuál es su visión sobre la situación actual de las mujeres en la ciencia y, en particular, en la bioquímica y la biología molecular en España?
Acabo de mencionarlo. La situación es francamente mejorable, aunque en nuestra área las investigadoras son muy pujantes, en especial las más jóvenes, activas, creativas y dispuestas a llegar. Encuentran también ahora un ambiente social más favorable y, en estos momentos, una inversión en ciencia que es muy superior a la de los últimos años, aún insuficiente, pero confiemos que con el apoyo necesario logremos olvidarnos de la tijera. Recomiendo la lectura del informe anual de la Comisión de Mujeres y Ciencia del CSIC.
España tiene una presencia femenina mayor que la media europea en ciencia e ingeniería, siendo solo superada por Noruega, Lituania y Dinamarca. Sin embargo, aún existen desafíos en cuanto a la representación de las mujeres en puestos de liderazgo. ¿Cuáles considera que son los principales factores que contribuyen a esta baja presencia y qué medidas podrían tomarse para abordar estos desafíos? Además, ¿existen iniciativas específicas dentro de la SEBBM para fomentar y apoyar la participación de las mujeres en la bioquímica y la biología molecular?
Los informes de los expertos apuntan a la educación en sus primeras etapas como un momento clave en el que las niñas deciden que las profesiones STEM no les atraen o más bien que no son para ellas. Por motivos diversos, ¿qué podemos hacer? Entre otras cosas, darles modelos de mujer investigadora, explicar mejor qué ofrece nuestra profesión, darles confianza en sus posibilidades, y apoyar a los educadores de Primaria y Secundaria. Colectivos que son muy bienvenidos en la SEBBM, según se explicita en nuestros estatutos, y a los que se destinan los artículos del Rincón.
Mencioné el fantástico trabajo de nuestro grupo transversal y aprovecho para destacar el concurso de dibujo.
Los medios de comunicación y sobre todo las Redes Sociales son otro factor clave para llegar a las niñas y a las jóvenes, estamos trabajando en esa dirección. Como mujer científica y trabajadora, me desalienta ver los modelos de mujer que nos ofrecen los medios. Pensaba que habíamos dejado atrás algunas cosas, pero era sólo un espejismo, no se puede bajar la guardia. Queda mucho por hacer. Adicionalmente, tenemos actuaciones específicas para reconocer la carrera profesional de una joven investigadora y, por supuesto, adheridos a la filosofía de la paridad en todos los paneles, si no te ven, no existes, y en todos los ámbitos, porque si no te ven, insisto, no existes.
“Debemos ofrecer modelos de mujer investigadora, explicar mejor qué ofrece esta profesión y darles a las escolares confianza en sus posibilidades”
La falta de vocaciones científicas es una preocupación en España, lo que impacta negativamente en la I+D+i y el emprendimiento. ¿Cómo contribuye la SEBBM a despertar el interés y fomentar las vocaciones científicas entre los jóvenes?
Las iniciativas para apoyar las vocaciones tempranas las apunté anteriormente. Me voy a centrar en las siguientes etapas, estamos muy enfocados en apoyar a los jóvenes. Por ejemplo, en nuestro congreso anual prácticamente todos los premios, que son muy numerosos, están dirigidos a fomentar su participación y su progreso. Además de unas cuotas de asociación y de asistencia que son casi testimoniales para los jóvenes. Aprovecho, una pausa para agradecer muchísimo a nuestros patrocinadores y socios protectores su apoyo generoso. Además, hemos lanzado en los últimos dos años premios a las mejores tesis doctorales y más recientemente la iniciativa #campusSEBBM.
A veces creo que, por resaltar los problemas, que los hay, quemamos las aspiraciones científicas, reducimos las vocaciones. Esta nuestra es una profesión preciosa y dinámica, que personalmente no cambiaría por ninguna otra. Se puede mejorar el atractivo, sí. Por ejemplo: hay un déficit colosal en el apoyo institucional a los estudiantes que quieren realizar una Tesis Doctoral, sería razonable, como sucede en casi todos los países con los que queremos compararnos, que se entrase en la institución a realizar el Máster con opciones de realizar la Tesis y con apoyo económico. Esta carencia empuja a muchos buenos estudiantes a realizar el Máster fuera. Se suma que las expectativas económicas no son buenas, considerando el nivel y la dificultad en el acceso al doctorado. Aun así, pienso que compensa por las oportunidades profesionales que se generan, por ejemplo, apenas hay paro entre los Doctores. Pienso que muchas de las dificultades que los jóvenes visualizan se deben a que hay una excesiva asociación entre hacer el doctorado y realizar luego una carrera investigadora en una institución pública. El Doctorado es una etapa formativa que permite acceder a otro tipo de trabajo de mayor nivel profesional y que puede ser muy variado en cuanto al ámbito, empresa, docencia, divulgación, gestión, etc. Es importante trabajar las capacidades y la visión de las oportunidades que ofrece una formación científica. Para ello, tenemos también nuevos programas como los de mentoría o las jornadas de la carrera investigadora, con la UCM.
Estaríamos encantados de colaborar en este ámbito. Somos más de 3.500 miembros que podemos aportar un abanico amplio de experiencias y de modelos profesionales.
En los últimos años, ha habido un aumento en la percepción positiva hacia la ciencia y la tecnología. ¿Cuáles cree que han sido los factores clave que han contribuido a este cambio en la opinión pública?
Es una tendencia mantenida, que crece. La sociedad española siempre ha sido muy receptiva hacia la investigación. Todas las actividades que organizamos desde 2008 son un éxito. Nuestra web recibe una media de 40.000 visitas al mes de todos los países hispanohablantes, pero también de rincones del planeta que nos traducen, y esto desde hace una década. Sin ningún apoyo institucional, con el esfuerzo de nuestros socios y socias. Sin duda, que esta confianza de nuestra sociedad en la ciencia se ha plasmado en hechos concretos. La pandemia ha sido un ejemplo de cómo los científicos y las científicas despertaban una gran confianza con sus explicaciones. Confianza que se plasmó en que se cumplieron las medidas y se vacunó la población de forma masiva. En momentos de crisis, es cuando más se necesita que haya una información disponible experta, veraz e independiente para informar a la sociedad, pero también para desarrollar políticas publicas y sociales. Un motivo trascendental para mantener una amplia base de investigación científica en todos los campos, con buena financiación. Algo que estamos aún lejos de alcanzar.
La divulgación científica desempeña un papel fundamental en la promoción del interés y la comprensión de la ciencia en la sociedad. ¿Cuál es la estrategia de la SEBBM en términos de divulgación científica y cómo se acerca a la sociedad para transmitir el conocimiento y despertar la curiosidad en la bioquímica y la biología molecular?
Decía Santiago Ramón y Cajal “al modo de los picos elevados, que emergen exclusivamente en las cordilleras, los genios científicos o artísticos descuellan solamente entre las altas mesetas de la cultura general”, o que “al carro de la cultura le falta la rueda de la ciencia”, una frase muy oída en este Año Cajal. Poco que añadir, cien años después, seguimos trabajando en ello. Afortunadamente estamos viviendo un auge de la divulgación científica, que ha venido acompañado y animado de premios a personas destacadas en esta labor. Más recientemente, se está valorando como darle mayor peso en la evaluación de la carrera profesional, como un tipo de transferencia.
Me gustaría que se premiara también a las entidades, ya que divulgar, desde mi punto de vista, es una tarea colectiva, más que unipersonal. Es un compromiso que se debería premiar a quien lo emprende colectivamente.
Hay divulgadores excelentes que se merecen todos los premios, pero hay más posibilidades de encontrar un comentario seudocientífico que uno fundamentado en las redes. Por esto, ahora, hay que centrarse en crear espacios fiables para divulgar y para leer, con calidad, y por ello vamos a abrir un BlogSEBBM, conectado con nuestras redes.
En mi experiencia, la divulgación es muy gratificante. En 2008, organicé la comisión de divulgación de la SEBBM. He aprendido muchísimo y he visto crecer y mejorar sin pausa esta faceta de nuestra sociedad, que me entusiasma, y que abordamos colectivamente. Lo mejor es ser testigo de las ganas de participar y de informarse de muchísimas personas, que tenemos la responsabilidad y el placer de cumplir.
¿Cuáles considera que son los principales obstáculos que impiden que España se convierta en un país referente en ciencia e innovación, y cómo se podrían superar estos desafíos a nivel político y social? La inversión en ciencia, investigación y tecnología tiene un impacto directo en la mejora del estado del bienestar, el sistema sanitario y los servicios públicos de calidad en España. ¿Cuál es su visión sobre el impacto de la inversión en la bioquímica y la biología molecular en estos aspectos clave?
Hay un obstáculo que es el porcentaje real del PIB que se dedica a investigación. Con inversiones muy por debajo de las de los países de nuestro entorno es imposible ocupar primeros puestos. De hecho, es admirable, y casi milagroso, el número de colegas que llegan a la excelencia competitiva internacional. Es un obstáculo que no depende de nosotros resolver, pero sí podemos señalarlo y comentarlo públicamente, directamente y vía COSCE, en cada ocasión que tenemos oportunidad. Adicionalmente, tendríamos que crear más y mejores puentes hacia los que dictan las políticas ya que hay una serie de idas preconcebidas que no ayudan. La famosa frase “los países no investigan porque sean ricos, son ricos porque investigan” hay que interiorizarla, que se nos considere una inversión y no un gasto superfluo. Hay que esforzarse en esta dirección.
Entre las propuestas que presentamos a los parlamentarios de varios grupos, con ocasión de la Ley de la Ciencia, estaban: crear un acuerdo multipartidista plurianual de financiación de la ciencia, y crear una comisión interministerial que abordase el impacto en la investigación de las normas y leyes. La investigación es un espacio sin aristas políticas y que necesita flexibilidad y dinamismo. Depender cada año de acuerdos y estar al albur de normas pensadas para entornos de trabajo muy distintos, son obstáculos.
Por otra parte, los grandes polos de investigación biomédica (NIH, Karolisnka…) tienen muy claro que es precisa la colaboración profunda entre la investigación básica, las plataformas de investigación y los clínicos. En la inauguración del NIH, el presidente Roosevelt dijo: “We cannot be a strong nation unless we are a healthy nation. And so, we must recruit not only men and materials, but also knowledge and science in the service of national strength”. Han pasado más de 80 años y sigue siendo cierto y el NIH un referente. Los compartimentos estancos y el corporativismo son obstáculos. Igualmente, hay que fomentar una mejor interacción con la empresa desde las instituciones y mejorar la transferencia, otra asignatura pendiente y, en mi opinión, no hay que buscar la responsabilidad en nosotros los científicos.
La colaboración público-privada es esencial para impulsar I+D+I. ¿Cómo se podría promover una mayor colaboración entre el sector público y privado en el ámbito de la bioquímica y la biología molecular?
La ciencia tiene que buscar el conocimiento del que llega la innovación, pero también la transferencia y la aplicabilidad, para lo que faltan mecanismos de apoyo. No se puede ser experto en cada aspecto. Se necesitan expertos, apoyo, formación, financiación y crédito profesional para los que toman este camino En este sentido, en SEBBM hemos creado un grupo científico transversal de Emprendimiento e Innovación (https://sebbm.es/grupos-cientificos/emprendimiento-e-innovacion/ ), al que invito a participar desde aquí. Igualmente hemos estrechado las relaciones con ASEBIO y con las empresas de nuestro ámbito, con la intención de que SEBBM sea un foro de comunicación para nuestros socios patrocinadores.
¿Cuáles son las acciones específicas que la SEBBM está desarrollando para fomentar el interés de los jóvenes en las carreras científicas y técnicas, y cómo se podría mejorar la información y la formación que se les proporciona sobre estas oportunidades profesionales?
He mencionado ya varias iniciativas y actividades, pero destacaré aquí la mentoría. Hemos comenzado formando a los mentores, porque escogimos profesionalizar el abordaje, y la acogida ha sido estupenda. Queremos crear una sección junior para lo que precisamos cambiar los estatutos, como vía adicional de integración de ideas y juventud en la SEBBM. Quiero destacar que ponemos mucho esfuerzo en los varios canales de comunicación SEBBM, la revista, la web, las redes, la lista de distribución a los socios y esperamos pronto tener el blog. Todos ellos cumplen el objetivo de comunicarnos internamente y hacia el exterior. Todos funcionan con el esfuerzo de los integrantes de la junta y de las comisiones, y por supuesto es clave la participación. Estamos abiertos a propuestas y siempre ávidos de recibir ideas y apoyo.
“Se puede mejorar el atractivo de la carrera investigadora: hay un déficit colosal en el apoyo institucional a los estudiantes que quieren hacer una tesis doctoral”
¿Cuál es el papel de la SEBBM en la formación y el desarrollo profesional de los investigadores en bioquímica y biología molecular en España, y qué programas o actividades se desarrollan en este sentido?
La SEBBM está enfocada a apoyar el desarrollo profesional de nuestros miembros en todas las etapas. Sobre docencia, además de lo mencionado, puedo destacar el tercer Grupo Científico transversal, que es el de Educación y el simposio anual que organiza este grupo en el congreso, entre otras actividades del congreso también dirigidas a la educación y a los estudiantes de grado.
¿Cuáles son las expectativas de la SEBBM en términos de colaboración internacional en la bioquímica y la biología molecular, y cómo se promueve la colaboración y el intercambio de conocimientos a nivel internacional?
Como SEBBM tenemos acuerdos con numerosas sociedades y pertenecemos a federaciones europeas e iberoamericanas, FEBS y PABMB, además representamos a España en IUBMB, y por ello, en el ISC. El congreso anual SEBBM es internacional. Hacemos un gran esfuerzo por poner al alcance de nuestros socios y de la comunidad en general un congreso de nivel altísimo, internacional y en casa. Una iniciativa del 60 aniversario ha sido lanzar las Conferencias Severo Ochoa, enfocadas a un tema de actualidad y en el que se busca una interacción muy cercana entre los participantes. La ciencia es internacional y por medio de estos vínculos, trabajados desde el origen de la SEBBM, ofrecemos a nuestros miembros un amplio abanico de oportunidades personales y profesionales.
¿Cuáles son los próximos proyectos y desafíos en la agenda de la SEBBM, y cómo espera que la sociedad científica contribuya al avance y desarrollo de la bioquímica y la biología molecular en España?
Han sido tres años de presidenta, más dos de presidenta electa, en los que no hemos parado de trabajar y hemos cumplido muchos objetivos. La nueva web, mejorar la gestión de socios, la nueva secretaría técnica, trabajar para recuperar el archivo histórico, las actividades nuevas online y presenciales, mejorar las redes sociales, crear y financiar los nuevos premios, crear nuevos grupos transversales y seguir con un nivel impresionante de actividad científica. Hemos superado muchas cosas trabajando en equipo. Los retos ahora son mantener todo lo anterior. En comunicación, lanzar la revista digital y el blog; organizativamente, crear la sección junior y dar mayor participación a los jóvenes y cambiar los estatutos, de forma que podamos aspirar a transformarnos en una asociación de interés público. La SEBBM cumple 60 años y la sociedad española, la sociedad mundial, ha cambiado de forma extraordinaria y cada vez más rápido. Cabe plantearse cuál es la función de las sociedades científicas, incluso de los congresos presenciales, en este siglo que aún no cumple el cuarto. Termino como empecé, nuestro papel es cada vez más importante como referente en la comunicación para “avanzar en la investigación científica, crear oportunidades para los investigadores en este campo y contribuir a la cultura científica”.